Mi nombre es Vicenta, resido en una comunidad rural del municipio y departamento del Quiché, soy maya hablante K’iche’, actualmente vivo con mis padres y estoy tan emocionada porque este año me voy a graduar del nivel diversificado.

Aunque no todo ha sido fácil para mí, pero con la ayuda de mis padres y de la fundación Educo, cada vez estoy más cerca de lograr una de tantas metas que tengo en la vida. Les contaré parte de mi historia.

Crecer en casa ajena fue parte de mi niñez, no teníamos casa propia, alquilamos por mucho tiempo la propiedad de un vecino, pero después tuvimos que salir de allí porque el dueño necesitaba la casa. Para mi familia fue muy difícil vivir en casa alquilada, porque el servicio de energía eléctrica era controlado, lo cual nos perjudicaba a mí y a mis hermanos hacer nuestras tareas de la escuela, también el agua potable lo teníamos limitado.

Poco a poco mis padres lucharon y lograron construirnos una casita, hace algunos años vivimos en ella y eso nos ha beneficiado a mí y a mis hermanos.

El año pasado pensé que era necesario ayudar a mi familia porque la Covid-19 afectó nuestros ingresos, por eso me dediqué a trabajar por un tiempo fuera de casa y estudiar a la vez, pero me costó bastante, me di cuenta que descuidaba mis estudios, mejor decidí apoyar a mis padres en la casa elaborando cortes en telar de cintura, eso ha sido posible porque cuento con el apoyo de Educo a través de una beca que estoy recibiendo que contribuye a los gastos de mi educación.

Afortunadamente mis padres tienen una buena mentalidad, en la familia somos cinco hijos en total, cuatro mujeres y un hombre, a pesar de ello, a todos nos tratan por igual y lo más importante es que nos motivan a estudiar. Me he dado cuenta de que, en mi comunidad, muchos padres solamente les dan estudio completo a los varones, mientras que a las niñas las envían a la escuela únicamente para que aprendan a leer y a escribir y luego de eso ya no las apoyan. Yo agradezco que mis padres no piensan así.

El principal motivo para seguir estudiando es tener una buena vida en el futuro, por eso me quiero preparar bastante para tener un trabajo y poder mantenerme a mí misma. El programa de becas de Educo me ha apoyado para sufragar muchos gastos en mis estudios, sin esa beca me vería en la necesidad de buscar un trabajo a tiempo completo y eso implicaría descuidar mis estudios o tener que renunciar a mis sueños.

En el futuro no muy lejano, me veo una profesional exitosa y con un trabajo, también tengo varios proyectos en mente, ayudar a las personas más necesitadas y a los animales, quiero construir un refugio para perros de la calle, luego sensibilizar a las personas para que sean responsables con sus mascotas.

Mientras tanto, ahora quiero animar a las niñas y señoritas para que reflexionen sobre qué es lo que quieren para su futuro, si quieren una vida estable, entonces las invito para que sigan estudiando porque la educación es muy importante si se quiere tener un buen futuro.

Pero también, mi mensaje para los padres de familia es animarlos para que analicen sobre cómo les gustaría ver a sus hijas en el futuro y que la educación es muy importante para las niñas.

Y para aquellos padres que no quieren que sus hijas estudien, los insto a que animen e inscriban a sus hijas en la escuela o instituto, que las apoyen para lograr sus metas en el futuro, yo creo que todos tenemos derecho de tener mejores oportunidades en la vida, porque una niña que estudia tendrá mejores oportunidades para su vida, podrá tener otras experiencias, conocerá a muchas personas, llegará lejos y logrará una vida estable en todos los sentidos, en cambio, una niña que no estudia, no tendrá esas oportunidades.

Actualmente Vicenta es parte del programa “Mi beca-apoyo para el ejercicio del derecho a la educación” que Educo impulsa en Santa Cruz del Quiché. A parte del apoyo económico, también brinda acompañamiento a las niñas para la construir su plan de vida.

Lamentablemente en Guatemala aún hay muchas niñas que no tienen oportunidad de ejercer su derecho a la educación, un dato del periódico Prensa Libre refleja que “A partir del nivel medio solo 15.42% de las mujeres indígenas continúan sus estudios, en el caso de las mujeres no indígenas es el 50%”. (Prensa Libre 20-12-2020 Pag. 12 y 13), todo esto es por falta de apoyo hacia las niñas.

Con tu donación podemos lograr que más niñas continúen sus estudios ¿Te unes a nuestra causa?

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