“Deseo que mi comunidad desarrolle y que las mujeres se les quite el miedo a participar”, a finales del 2020, doña María Verónica nos compartía esta frase motivadora y ahora, luego de un tiempo de formar parte de un proyecto que Educo ejecuta junto a la organización Tierra Nueva en el municipio de Santa Bárbara, Huehuetenango, ella tiene mucho que contar.

Desde las tierras altas que forman parte de la Sierra de Los Cuchumatanes, en el bello departamento de Huehuetenango, nos encontramos nuevamente con doña María Verónica, esta vez, junto a su grupo de mujeres que integran una unidad productiva, ya han obtenido la primera producción de cerdos de engorde, del cual, ella siente satisfacción. Por medio de una breve entrevista y bajo un intenso sol de medio día, clima que caracteriza la aldea Xoconilá, ella nos compartió su experiencia.

¿Cómo se sintió en esta primera fase de producción?

Para mí, siempre fue una responsabilidad cuidar a los cerditos, me siento feliz al realizar esta actividad. Con las mujeres que conforman mi grupo, nos sentimos muy contentas porque ya vendimos la primera producción de cerdos.

Ahora, que ya vendimos la primera producción, ya estamos con la segunda producción y nos sentimos contentas y con más conocimientos para cuidar los cerditos, porque mientras más los cuidamos, especialmente en su alimentación e higiene, obtendremos más ganancias.

¿Qué dificultades encontraron durante la etapa de producción?

Las actividades que realizamos en la cría de cerdos, no nos representó un trabajo costoso y tampoco encontramos ninguna dificultad porque trabajamos en equipo.

Cuando vendimos los cerditos, nos quedamos tristes porque llegamos en el punto de encariñarnos con ellos, pero a la vez, yo me siento contenta, porque ya nos ingresó otra producción y para nosotras, el cuidado de los cerditos no nos consume mucho tiempo.

“Trabajar en grupo ha sido una bonita experiencia, porque juntas y en equipo
podemos salir adelante, además de compartir buenos momentos”
Marina Oralia, participante.

¿Qué es lo que espera usted y las demás mujeres de esta experiencia de producción de cerdos?

Nosotras queremos el desarrollo para las mujeres, a través de un proyecto que nos pueda ayudar para salir adelante, porque aquí en la comunidad, hay muchos niños con desnutrición y mucha pobreza, pero gracias a Tierra Nueva, Educo y la Xunta de Galicia que nos están ayudando y nosotras podemos seguir adelante con el proyecto, porque estamos obteniendo experiencia sobre cómo producir cerdos.

¿Qué es lo que más les sorprendió dentro del proyecto?

Lo que más nos sorprendió es que los cerditos se hayan engordado durante cuatro meses. Nosotras hemos tenido experiencia con cerditos que criábamos en casa, pero estos tardaban en engordarse en un período entre ocho meses o hasta un año, no veíamos mayor ganancia, pero en este proyecto ¡cuatro meses es bueno! Por eso, agradecemos por la organizaciones que están implementando este proyecto con nosotras.

¿Cuáles fueron los principales aprendizajes que obtuvieron dentro de esta primera producción?

Aprendimos sobre aspectos técnicos, como el pesaje de cerdos, la limpieza de cada día, la identificación por medio de la puesta de los aretes para identificar a los cerditos por si algún día un animalito se enferma, así llamar a la organización Tierra Nueva para orientarnos.

También aprendimos otras cosas importantes como el derecho de las mujeres, autoestima, además, cómo debemos cuidarnos, querernos y darnos nuestro espacio.

¿Qué es lo que más valora de esta primera experiencia?

Gracias a las organizaciones como Educo y Tierra nueva por darnos esta experiencia en la producción de cerdos, aprendimos a valorar muchas cosas. Algo que quiero mencionar es el cariño que sentí por los cerditos, cuando los vendimos, me sentí triste al ver que ya no estaban en la cochiquera. Había un cerdito al que le puse nombre, le llamé “Pinto”, cada vez que le llevaba su comidita, hablaba con él y le decía, “cayese pinto que ya te voy a dar comida” y cuando los vendimos, me quedé triste.

¿Además del aprendizaje, cuáles fueron los logros más sobresalientes?

Al final de la producción de los cerdos, nosotras recibimos un dinerito, realmente no fue un trabajo difícil porque supimos coordinarnos con mis compañeras de grupo. Gracias a Dios porque obtuvimos una ganancia que nos permitirá darle un nuevo uso, por ejemplo: comprar pollos, chompipes, u otros. Ese dinero que obtuvimos por la producción, no lo utilizaremos para comprar ropa, más que todo, será para que el proyecto sea sostenible.

Nosotras no nos vamos a quedar aquí, vamos a seguir trabajando con este proyecto. Si un día, yo ya no pueda comprar cinco cerditos, pero tengo que comprar por lo menos dos y una parte de las ganancias que obtendré lo voy a ahorrar y, otra parte será para la alimentación y medicamento de la producción.

¿Qué beneficios cree usted que recibe su familia al ser parte de este proyecto?

Cuando un hijo se me enferma, puedo colaborar con medicina, calzado, educación, porque mi esposo no se da abasto con todos los gastos, tenemos otros gastos como el pago de la academia de mecanografía para mis dos hijos que estudian en nivel básico, pagamos agua y luz, entre otros beneficios que obtenemos.

¿Cómo se visualiza doña María después de que el proyecto culmine?

Tal vez yo no tendría la capacidad de comprar cinco cerdos, pero al menos podría adquirir dos para seguir con la producción, yo no me quedaré sin producir.

El proyecto que vincula a mujeres Mam al sector agropecuario en Santa Bárbara, Huehuetenango.

 

De las 19 unidades productivas establecidas en Santa Bárbara, ocho de ellas ya obtuvieron su primera producción, es decir, en un lapso de cuatro meses lograron obtener un peso adecuado de los cerdos proporcionados, lo que facilitó a comercialización a través de la organización Tierra Nueva, con la asistencia de Educo.

Cada unidad productiva está conformada por grupos entre seis a siete mujeres a quienes se les proporcionó cinco lechones y se les acompañó durante el proceso de cuidado hasta su etapa de comercialización. Actualmente, once unidades productivas están en la etapa intermedia en la etapa de producción de cerdos.

El Proyecto de fortalecimiento de las capacidades de incidencia política y generación de alternativas productivas sostenibles en mujeres Mayas Mam vinculadas al sector agropecuario de pequeña escala en el municipio de Santa Barbara Huehuetenango, es ejecutado por Educo Guatemala y la Organización Tierra Nueva, con el financiamiento de La Xunta de Galicia.